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viernes, 7 de junio de 2013

Ni Santos, Ni Uribe, ni el centro, ni la izquierda...ahora le toca al pueblo.

En Colombia ni la izquierda ni la derecha tienen soluciones para los gruesos problemas de la nación.

Tres son las opciones actuales de poder político en Colombia, la derecha que viene en dos presentaciones, de un lado la extrema derecha (Uribe, Pacho Santos, Londoño) quienes representan la rancia elite más podrida de Americalatina, en ese mismo lado pero con sutilezas y astucias están la derecha taimada y moderada, la de JM Santos, quienes al igual que los extremistas de ultraderecha también representan al mercaderismo criollo que gobierna a Colombia desde Santander, además, como toda derecha en Americalatina los mercaderistas extremos son agentes confesos del corporativismo global, del mismo que regenta el poder mundial: ambos son amos de todas las guerras, toda destrucción del ser y toda la defenestración planetaria.

De otro lado está la segunda opción, la izquierda, que no es ni chicha ni limonada, al igual que los de la derecha extrema o los de la derecha taimada y moderada carecen de soluciones a los reales problemas para los colombianos. Con muy pocas excepciones, entre ellas Petro, algunos lideres de la izquierda apenas acarician el poder se transforman en mercaderistas de los intereses populares, como el vicepresidente Garzon o los Moreno, o son simples autores materiales en estructuras sociales o sindicales como el sr Julio Gomez. 

Todos por igual, izquierda o derecha en Colombia, se han limitado a maquillar sus incompetencias frente a todas las guerras que están en la agenda del Cartel  Monetario Global (mercaderistas criollos y corporativistas en el poder politico nacional)  por esa razón, al no tocar la solución holística a la guerra (paracos o bacrim/guerra prolongada /violencia-desempleo-deuda publica/dinero como deuda/economía de guerra) y nutriendo con el fraccionamiento de toda la fenomenologia social, JM Santos le dejara una vela encendida al diablo de la guerra prolongando la intromisión  de la OTAN en Americalatina y fortaleciendo el paramilitarismo Uribista (denominado ahora bacrim), asi pues, con JM Santos la guerra va de la mano de acciones sigilosas, efectivas contra toda la sociedad civil y contra el 97.5% de colombianos unidos en la pobreza estratificada. 

Todas las acciones de guerra en Americalatina han sido dirigidas por la Otan con la ayuda de los mercaderistas criollos durante el siglo XX y sin necesidad de filiación legal con la supremacia mafiosa, de todos modos durante un siglo el cartel monetario ha sembrado de  barbarie a Americalatina, en cambio con Uribe y sus secuaces, eso de la guerra y la corrupcion seguira siendo lo mismo pero con algarabías, show mediáticos y rabietas.

La tercera opción, los que se autodenominan de centro, no son opción de nada, excepto de emerger como culto a la personalidad de alguno de sus líderes porque al igual que los anteriores carecen de propuestas que depongan la criminalidad galopante del Cartel Monetario Global y los efectos de su brazo monetario al mando del corporativismo global.

 Ninguna de las opciones político-electorales actuales en Colombia acabaran con las multiples guerras o entelequias que afectan a los colombianos y la región (contra las drogas, contra guerrillas, contra bacrim, contra minorías etnicas, contra terroristas contrarios) guerras de, por y para perpetuar las crisis economicas, las deudas publicas, la supremacia del mercado sobre las naciones, la miseria en general, todo ello para  garantizar el absoluto  control de los poderes globales-glocales por parte del Cartel Monetario Global, quienes creen tener la potestad de seguir explotando nuestras naciones en Americalatina, además, con la farsa de la lucha de contrarios en Colombia esa mafia suprema cuenta con la veneración o el odio de unos u otros,  ambos caminos van a la esclavitud y ambas formas u opciones de poder expresan aquiescencia con el poderío mafioso global-glocal.

Todas las opciones político electorales actuale en Colombia carecen de propuestas para detener la destrucción del ser, el saqueo perenne a la soberanía nacional y el aumento a toda defenestración planetaria. Según el Banco mundial, información presentada por el Tiempo,  el 67% de los colombianos están en la pobreza, un 2,5 por ciento de la población son considerados ricos porque ganan mil dólares mensuales, o sea 2 millones de pesos, esta población privilegiada la forman cerca de 1,2 millones de personas quienes cumplen esta condición, pero en realidad, con ese ingreso una persona apenas es un pobre con algunos privilegios, como viajes, seguridad laboral, una profesión y la pertenencia a clubes sociales. Mientras que un 30.5% fue acomodado por el BM como clase media porque hacen parte del circuito económico de empleados con uno o dos salarios mínimos o hacen parte de la economía informal. Este cuadro económico nacional colombiano es espeluznante, el ingenio del Banco  Mundial (agencia del Cartel Monetario Global) consiste en convertir en clase media a los pobres cuya fortuna es tener acceso a la esclavitud con salario, o sea, tener acceso a un empleo mal remunerado sin seguridad laboral.

La realidad colombiana es la pobreza estratificada por el cartel monetario global, así:

·        los asalariados o pequeños comerciantes extremadamente felices por tener empleo con seguridad social ganando mil dólares o algo más ( son el 2.5%  de la población), 
·        los muy felices de tener el privilegio de uno o dos salarios mínimo mensual- SMM (son un 30.5%, estos son lo que el BM presenta como clase media pero en realidad son pobres con felicidad moderada).
·        los felices de contar a veces con un SMM (son un 36% ), segun el BM estos estan en riesgo de ser pobres. Que tal este chiste de mal gusto?
·        los infelices a pesar de tanta felicidad, son quienes estan felices de  seguir existiendo a pesar que la guerra se dirige sobre todo contra ellos, a pesar de no tener ingresos salariales y de ser quienes engrosan las filas de paras o bacrim, de guerrillas, delincuentes comunes, desempleados, desplazados, seres humanos quienes solo existen para justificar el negocio de la guerra eterna del Cartel global contra la humanidad (estos son un 31% de los colombianos).

Es inaudito que una población del 97.5% de colombianos inmersa en la pobreza no haga otra cosa que elegir a una minoría quien los gobierne, perpetue su destino y siga alimentando su poder con la pobreza generalizada. Esa minoria esta compuesta por  menos del 0.1% de la poblacion, esta compuesta por políticos corruptos y ladrones, mercaderistas que han saqueado la nacion, que entregan la soberania por pedazos cuando les viene en gana, que prosptituyen  la soberania ante las corporaciones y multinacionales. Es inexplicable que la mayoria de un 97.5% elija la guerra, la miseria y la autodestrucción humana, lo unico bueno es que nada de eso hace infelices al 97.5% de colombianos, y es bueno porque eso mismo permite al pueblo aunar voluntades para deponer al perpetrador global sin necesidad de incurrir en la  desprestigiada infelicidad. Quizas en medio de la inevitable felicidad de existir de las masas por fin las minorias corruptas que gobiernan a Colombia sean puestas en el sitial de la historia que les corresponde: fuera de todo poder publico.

Ahora es la oportunidad de elegir una nueva opción distinta de estos saqueadores de recursos, mercaderistas de toda destrucción del ser y de toda la defenestración planetaria. Tomarse el poder es intervenir lo que nos afecta: la corrupcion, el cartel monetario global, el mercaderismo y corporativismo, las guerras y entelequias conflictivas para perpetuar el monetarismo mafioso...No mas basura, no mas falsas estratificaciones ni estratificadores, no mas  farsas de lucha de contrarios, ni corruptos gobernando ! Ahora le toca gobernar al pueblo.