No más indiferencia con las victimas.

INTERVENCION: Envía mensajes de  VETO y bloqueo de consumo a cada empresa que paute el crimen en Colombia. 

Señores de las compañías  Nivea, Fruco, Tigo, Efecty,  Auteco, Claro, Éxito,  Falabella, glaxosmithkline, Winnie, Dolex, Sensodine, Corega, Ésika:  Durante al menos 1 año no consumiré los productos de su empresa en rechazo a la apología del delito, a los crímenes y la violencia que su empresa legitima pautando en el programa los 3 Caines de RCN, el cual convierte en héroes o victimas a los criminales, promueve y agencia la corrupción y la parapolítica por encima de la dignidad de las víctimas de violencia en Colombia. Si desea que nuestras redes sociales detengan  la justa protesta de VETO y bloqueo de consumo a sus productos en gran escala, favor anunciar que su empresa no seguirá pautando en los 3 Caines-RCN.

Amigos de las Redes sociales: Invitemos a apoyar el movimiento de apoyo a las víctimas del conflicto en Colombia. Invitemos a intervenir el proceso sistémico de destrucción de la vida en la sociedad de la violencia e instaurar la sociedad de paz con justicia social. Realiza tus aportes, doy comienzo a esta iniciativa efectuando un aporte inicial de 500 dólares (Un millón de pesos), que depositaré en una cuenta de una organización defensora de las víctimas de la violencia en Colombia, pronto escogeremos una, y propongo reunión otras mil personas con aportes similares, completaremos al menos mil millones de pesos, ese dinero será destinado a cofinanciar programas masivos de sensibilidad y culturización con las víctimas de violencia en Colombia. Somos consumidores pero no consumimos basura.

Sr . Gustavo Bolívar.

Editor de los 3 caines RCN.

Cordial saludos. A mi dominio llega un enlace desde su blog dando cuenta de su inquietud por nuestra posición  de sociedad civil frente a la patología de masas que destruye la dignidad de ser de las víctimas del conflicto en Colombia, según su postura, usted nos pide reflexionar y nos invita a ver la otra cara de la moneda en Gustavo Caicedo Obregón Lee Pues bien, eso hemos hecho.

Hasta usted ha llegado nuestro mensaje  o sentir procedente de la sociedad civil. Las personas que hemos optado por manifestar nuestra  reacción a las agresiones mediáticas de RCN de una forma espontánea,  estamos elevando nuestra voz en tanto que consumidores netos; por tanto,  hemos resuelto dejar de ser consumidores-pasivos  porque de forma objetiva o subjetiva somos víctimas de la desviación cultural que se pretende desde las esferas de poder mediático, cuyo accionar alcanza proporciones tan crecientes como aberrantes  en un país ya habituado a mancillar la dignidad de las víctimas.

Usted se ha tomado el tiempo de responder a nuestra  iniciativa civil, sepa que entender es propio de la razón y comprender es propio del corazón, razón por el cual rechazamos que las víctimas no sean entendidas ni comprendidas en su dimensión humana, ni tratadas con dignidad ni con el más mínimo respeto por parte de los efectistas del mercaderismo. 

En sus argumentos  de porqué nacieron los grupos paramilitares, Sr Gustavo B, es increíble, caótico y por demás lamentable que conceptos de tan escaso contenido académico-profesional –como los suyos- diagnostique la  terrible patología social que padece nuestra nación, puesto que no se trata de justificar crimen alguno, venga de donde venga, se trata de respetar a las víctimas, quienes pese a que no escogieron a su perpetrador ni a los cómplices perpetuos del delito en que nos hemos convertido, aún las victimas sufren  las secuelas de la indiferencia civil, del cinismo colectivo, de la patraña mediática, del influjo de los mercaderistas, de los parapolíticos aun en el poder; en fin, nuestro  propósito primario es trata de ayudar a sanar las heridas a las víctimas, vejámenes causados por los extremos doctrinarios en pugna por el poder en Colombia.

Parece que usted desconoce que el verdadero gobierno global es el corporativismo, representado en Colombia por los mercaderistas criollos, a quienes poco o nada les interesa quien gobierna porque todos los gobernantes son objeto de su manipulación mediante tres tipos de negocios o armas: monetarias (el dinero), de guerra (armas de fuego) y de comunicaciones (la información). Fíjese que su postura no dista de la de Ben Bernanke; en primera instancia, respecto de los programas de televisión y las armas de comunicaciones (la información), usted justifica el rating porque la gente las quiere ver. A nadie se le obliga, a nadie se le pone un revolver en la cabeza para que las vea”.

En segunda instancia, el ex-director de la FED, Bernanke, respecto de las armas monetarias (el dinero), tambien decía que a la gente no se le obliga a tomar una hipoteca pero que la gente suele caer en el error de la exuberancia irracional por si mismo, pues bien, en ambos casos, en el suyo en materia de comunicaciones y en el de Bernanke en materia monetaria, la tramoya está justo ahí en la exuberancia irracional, dado que la vida de los incautos es el negocio entonces la exuberancia irracional es el eje del aberrante negocio monetario o mediático, y que consiste en provocar que el consumismo sea un reflejo condicionado de masas, de tal modo, que es fácil conducir a la gente como borregos hacia la guerra, hacia el crédito desaforado o la toma de hipotecas suprime, y hacia la información desviada, distorsionada o conveniente (verdad suprema o  inteligencia superior le llaman los efectistas criollos).  Es obvio: no se requiere un arma en la cabeza sino una patología dentro de ella, se llama exuberancia irracional y tanto usted como Bernanke lo saben explotar.

He allí pues, las tres armas de poder moderno en función de mover las masas hacia donde les plazca. El empobrecido contenido sociológico de su desviación cultural, Señor Gustavo B,  causa tanto o más daño a la sociedad colombiana que los perpetradores materiales, muchos de aquellos perpetradores cesaron en su accionar, algunos están muertos o encarcelados; otros persisten amenazando a las víctimas y se refuerzan en su desviada visión cual si fuese un patrón cultural; en efecto, con estos programas al estilo de los 3 caines y Escobar el patrón del mal los mercaderistas ganan por partida doble, se legitiman, se perpetúan y aumentan sus riquezas en proporción inversa a como las víctimas se empobrecen...lo triste es que ellos solo desean ser reconocidas como tal.

Señor Gustavo B, no tenga miedo de que la noche acabe antes de que otros entiendan la vida, más bien, durante la noche póngase en los zapatos de las víctimas del conflicto en Colombia para evitar terminar de destruir las vidas de quienes han sido tan salvajemente golpeados, víctimas de los 3 bandos ultra-extremistas (izquierda, derecha e indiferentes beligerantes como usted), entonces quizás usted sepa lo que es un campesino desterrado y ser despojado de su tierra, un estudiante asesinado por no estar de acuerdo con el sistema de cosas, un sindicalista o docente  asesinado por educar su sociedad, un civil cualquiera víctima de la creciente violencia: no olvide esto, aunque los efectistas nos vendieron seguridad por libertad y aunque perdimos ambas cosas, aun así, los efectistas-mercaderistas y corruptos que han usufructuado el poder en Colombia aún creen que con solo cambiarle el nombre a los perpetradores cambian el fenómeno, los Uribistas llamaron BACRIM  al fenómeno paramilitar y parapolítico, con eso creen poder desaparecer o curar el terrible mal que inocularon y aun tratan de eternizar.

En sus 3 caines, con eso de ocultar a los perpetradores parapolíticos-mercaderistas y cambiarle el nombre a los perpetradores tampoco cambiará la realidad. Por tanto, es apenas evidente que el cuarto poder, el de la mass-media, se ejerce a través de programas empobrecidos en materia sociológica como los 3 caines y Escobar el patrón del mal, los cuales se encargan de ocultar o legitimar a uno de los actores criminales que han lacerado a Colombia durante decenios, éstos programas retorcidos no tienen por fin mostrar verdades latentes porque los verdaderos criminales aún siguen  merodeando los círculos de poder legislativo e influenciando al poder ejecutivo actual, y en cualquier caso, volviéndose una y otra vez contra las víctimas  y enarbolando el poderío que ostentaban con el gobierno anterior.